23 de noviembre de 2007

EL DINERO Y EL MERCADO
Leo en ELPAIS.COM que Austria renuncia a participar en la próxima edición de Eurovisión. Sus motivos tienen, y acertados y coherentes me parecen (aunque se han quedado cortos con las críticas). La tele, salvando canales y programas de calidad y de reconocido prestigio periodístico, se mueve por otros intereses, vamos, el dinero, resumiendo.

En el sistema de voto de este concurso musical internacional pasó a ser herramienta fundamental los mensajitos de móvil. Era de esperar, dinero, dinero y más dinero. Las televisiones ganan millones de euros gracias a los SMS, normal que nos regalen coches, nos inviten a dar nuestra opinión, nos permitan votar y nos ofrezcan tonos, politonos, sonitonos.

En fin, puro interés por el dinero. Normal. Como toda empresa, buscan beneficios y ya sabemos que en el negocio de la televisión no se tiene ningún escrúpulo (el fin si justifica los medios, piensan en las cadenas). No les importa incomodar y no respetar al espectador mientras ve su canal, con rótulos comiéndose la pantalla. Nos tratan como a imbéciles con insomnio preguntándonos de que color era el caballo blanco de Santiago. Y qué decir de las salvajadas, insensateces y demás mierda (si, mierda, esa es la palabra) que algunos programas de televisión nos regalan. Se tratan temas importantes y delicados con falta de respeto y de sentido común. Drogas, maltratos, violencia, acoso, intimidades familiares. Todos estos temas son el pan de cada día en la tele nuestra de hoy.

Autentica podredumbre comunicativa. Desprecio por una respetable profesión. Un insulto al televidente.

El Roto, elpais.com, 15/12/2005

Podemos disfrutar (gracias a internet) de emisiones memorables y programas de calidad los cuales lamentablemente cada vez quedan más alejados en el tiempo.


En fin, nunca se crean TODO lo que sale en televisión (telediarios y misas dominicales incluidos, por supuesto).